Ikigami, Comunicado de Muerte Nº 3 (de 5)

Con el comienzo del nuevo curso escolar, da comienzo también una nueva campaña de vacunación por la prosperidad estatal. En esa época, los casos por ideologías corruptas aumentan en todo el país, y más ahora que el conflicto bélico entre la Confederación y las tropas aliadas parece inminente. La vacunación por la prosperidad estatal comienza a hacer estragos entre la pobla-ción, incluso entre los pediatras encargados de poner las propias vacunas...

Mientras Fujimoto sigue con su labor del reparto de ikigamis, los comunicado de muerte que avisan a su receptor de que morirá en 24 horas, algo está cambiando en la Oficina Municipal de Musashigawa tras el caso de disidencia de la doctora Kubo: parece que el Gobierno no piensa permitir las ideologías corruptas y se advierte a los funcionarios de que se van a instalar más cámaras de vigilancia. ¿Pondrán a Fujimoto en peligro las dudas que siente con respecto a la Ley para el Sostenimiento de la Prosperidad Estatal?

En este país hay una ley, la Ley para el Sostenimiento de la Prosperidad Estatal.

Consiste en el reparto de unos comunicados, los ikigami, que notifican la muerte a unos pocos elegidos, para que los ciudadanos respeten la vida y contribuyan al progreso del país. La candidata a las elecciones municipales Kazuko Takimoto deberá demostrar su fidelidad a la Ley cuando alguien muy cercano a ella reciba el ikigami. Por su parte, Fujimoto seguirá desempeñando su trabajo, cada vez más conforme con el trabajo... ¿o son solo apariencias?

¿Qué harías si supieras que vas a morir mañana?

La ley para el sostenimiento de la prosperidad estatal establece que se repartirá un comunicado, también llamado ikigami, para notificar la muerte con 24 horas de antelación a ciertos ciudadanos elegidos de entre 18 y 24 años.

Esta medida intenta promover el respeto y el aprecio por la vida, de forma que la productividad y la natividad aumenten mientras que la criminalidad y la inestabilidad desciendan. Kengo es uno de los funcionarios que reparten los comunicados a sus desdichados destinatarios. ¿Cómo afronta una persona sus últimas 24 horas de vida?