Héroe Fugitivo Nº 08

Mientras Yasuie lleva a cabo su intento de asesinato al emperador, Tokiyuki busca una vía de escape y, casualmente, acaba topándose con Masashige Kusunoki, el “dios de la guerra”. ¡Es entonces cuando decide adentrarse él solo en el palacio de uno de los hombres de confianza del emperador para aprender las técnicas de huida secretas! ¡Y, además, por fin tendrá su gran oportunidad de acercarse a Takauji Ashikaga! ¡Siguiendo un plan elaborado por Fubuki, Tokiyuki y los demás intentarán asesinar al mismísimo Takauji!

¡Yoritsugu, el nieto de Yorishige que ha heredado el trono divino, desafía a Tokiyuki a un juego del pilla-pilla por el derecho a permanecer en el gran santuario de Suwa! ¿¡Podrá huir de los intentos de sabotaje y darle su merecido a esa divinidad arrogante!? Después, Tokiyuki y los demás se dirigen a Kyoto guiados por Yasuie Houjou, y pese a que disfrutarán de la cultura de esa enorme metrópolis ocultando sus identidades, no tardarán en verse envueltos en una peligrosa partida de Sugoroku contra Mima, una chica… ¿¡con poderes divinos!?

Sadamune Ogasawara, quien sospecha que Tokiyuki es un vasallo de los Houjou, le desafía a una contienda verbal. Tokiyuki, para no revelar su verdadera identidad, esquiva con destreza las afiladas palabras que este le lanza, pero tras la aparición del ayudante de Ogasawara, Ichikawa, la situación da un giro inesperado… A eso se le suma la creciente tensión en numerosos lugares de Shinano por unas nuevas órdenes del emperador Go-Daigo. ¡Comienza la primera refriega para recuperar su mundo!

Las partidas de Hoshina y Saburou, hartas de la tiranía del kokushi nombrado por el emperador Go-Daigo, Kiyohara Shinano no Kami, se han rebelado alzándose en armas pese a ser conscientes de que no tienen oportunidad alguna de salir victoriosos. Tokiyuki partirá para intentar convencerles de que se retiren, pero antes de que su voz alcance los oídos de los guerreros ansiosos por sacrificarse en el campo de batalla, estallará la guerra.

Tokiyuki Houjou, quien se suponía que iba a heredar el shogunato de Kamakura, perdió a su pueblo y su familia tras la rebelión de Takauji Ashikaga. Yorishige Suwa decidió ocultar a Tokiyuki en el territorio de Suwa pero Sadamune Ogasawara, haciendo uso de un decreto imperial, planeó arrebatarle Suwa a Yorishige.

Tokiyuki, con la ayuda de Genba, se infiltró en el palacio de Sadamune para robarle dicho decreto y saboteó su plan. Unos meses después, la Partida de los escapistas se embarcó en una misión de reconocimiento a la frontera norte de Suwa y allí se toparon con un joven blandiendo dos espadas…